La sencillez es una de las virtudes más complicadas de este viejo mundo. Cuando uno es sencillo ( en su habla,en sus actos,incluso en su poesía) corre el incómodo riesgo de ser tomado por tonto. Hay críticos,por ejemplo,que son propensos a elogiar solamente a aquellos poetas misteriosos,cuyas obras son comprendidas por muy pocos. Esos mismos críticos tampoco los entienden,claro,pero tienen cierta habilidad para cabalgar por fuera del misterio,haciendo su ignorancia una inédita de discreción.
Si uno lee a Baldomero Fernández Moreno o a Machado,y capta la sabiduría de su sencillez,quisiera salir a abrazarlos,como si aún estuvieran ahí,con su pluma en ristre.
Todo mandante,ya sea el mandamás como el mandamenos,se afana (sobre todo cuando afana) en no ser sencillo. La dificultad es su muro de contención,su bastión,su blindaje. En la sencillez,los hombres y mujeres se amparan,se comprenden,se alivian. En la complejidad,en cambio,se ven con desconfianza y con rencores.
Vivo en paz,simplifico mi vida,no me la complico,huyo de los problemas,así he sido toda mi vida,esa es mi actitud mi lema de vida.
Les doy la bienvenida a éste, mi nuevo (y primer) blog, donde plasmare todas mis ideas, pensamientos y sentimientos.
viernes, 20 de septiembre de 2013
SOBRE LA SENCILLEZ
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